La madurez de nuestra sociedad, junto al desarrollo progresivo del ordenamiento jurídico y de nuestra Jurisprudencia han permitido la evolución del campo de la Responsabilidad Civil. Ello ha provocado que determinadas situaciones antijurídicas que antaño quedaban impunes, con la evidente sensación de injusticia que padecía el perjudicado, hoy en día sean perfecta y habitualmente indemnizables.
Son variopintas las situaciones de las que puede nacer una responsabilidad civil que conllevarán el derecho del perjudicado a ser indemnizado:
- Lesiones causadas por animales de un tercero (mordeduras …).
- Caídas en establecimientos comerciales por un inadecuado mantenimiento de sus instalaciones.
- Perjuicios ocasionados por la negligente actuación de determinados profesionales (asesores, médicos…).
- Daños en la edificación de los que responderán los diferentes agentes que hayan intervenido en la misma (promotor, constructor, arquitecto, aparejador…).
- Daños y perjuicios ocasionados por productos o servicios defectuosos.